jueves, 2 de diciembre de 2010

Mi fin.

Ya eh tomado mi dulce veneno, eh elegido mi enfermedad.
Sudo, traspiro, no paro de moverme, no paro de alucinar.
Todo me resulta borroso, tengo ganas de vomitar.
Mis venas deseando desesperadas por salir de mi piel, romper ese hilo inútil.
No encuentro la paz. Lloro y grito a los seres que me aman.
Agarro el cuchillo. Amenazando.
Todo esta por terminar, lo sé.
Siento a la muerte que me agarra el hombre.
¡¡PAREN!!
(es Satan)
Oh sí, Dios mío, el amor que te tengo hacía ti.
Solo llévame de aquí a las llamas eternas... .

No hay comentarios:

Publicar un comentario